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Felipe Reyes rodeado de jugadores de Unicaja.
fotografía as.com |
Unicaja 94 Real Madrid 79
Segunda semifinal Partido disputado en el Palacio de los Deportes Martín
Carpena de Málaga. 2 de octubre de 2015. 21:30 horas.
El Real Madrid sucumbió en la semifinal de la Supercopa Endesa 2015 ante
un Unicaja que fue muy superior durante 30 minutos. Sin defensa y con
poco acierto en ataque nunca tuvo opciones reales para llevarse el
choque. Salvo un primer cuarto igualado, el partido fue claro para el
Unicaja, justo vencedor.
Los locales, con muchas más ganas, público a favor, y alguna que otra
ayuda arbitral, se verán las caras frente al Barcelona en la final.
Reyes, con 18 puntos y Carroll y Rodríguez, con 16, fueron los mejores
de un gris Madrid. Thomas, con 15 puntos, fue el mejor por parte local.
Duro varapalo para Laso pero la Supercopa no deja de ser un torneo menor
en plena pretemporada. La semana que viene comienza la Liga Endesa donde
el Real deberá sobreponerse de una derrota dolorosa por la imagen
ofrecida en muchos momentos del choque.
El Real Madrid afrontaba el encuentro con las bajas de Rudy Fernández y
Jeffery Taylor. El ambiente, hostil, como siempre que el Madrid visita
Málaga. Comenzó el encuentro el Real con Ayón y Felipe Reyes para el
juego interior, Carroll y Llull como exteriores y Maciulis como 3
fuerte. El Madrid anotó en sus dos primeros ataques, gracias al juego
entre pivots de Felipe y Ayón. Defendía bien y encontraba buenos tiros
en ataque. No le quedó otra a Joan Plaza que pedir tiempo a los 3
minutos porque el Madrid estaba muy cómodo sobre el parqué (2-8). Reyes
seguía haciendo mucho daño a Thomas y Llull jugaba con Smith.
Sin embargo, tras el tiempo de Plaza, tres triples consecutivos metieron
al Unicaja en el choque. Su poderío en el rebote ofensivo y la mejoría
en su defensa fue determinante. El parcial de 11-0 animó a la grada
local y Unicaja volteó el marcador (17-12, min. 7). Recuperado del golpe
recibido, el Madrid se rehizo gracias a la energía de Felipe Reyes (9
puntos y 4 rebotes). El capitán se echó al equipo a la espalda. Al final
del primer cuarto la igualdad era máxima, 17-17.
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Carroll ante Smith en un lance del partido.
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Con el capitán blanco descansando exhausto en el banquillo, el segundo
cuarto trajo a nuevos protagonistas en el equipo de Laso. Y el Madrid se
resintió.
Dos triples brutales de Sergio Rodríguez no sirvieron para que
el Real cogiera el mando del choque porque Nedovic estaba muy fino y la
segunda unidad de Laso naufragaba en defensa (31-23, min. 3).
A pesar de los intentos del Chacho, Unicaja lideraba el marcador con solvencia
(38-28, min. 5). Ni Willy Hernangómez ni Luka Doncic parecen preparados
aún para este tipo de partidos de ritmo alto y sangre caliente. Pablo
Laso apostó por ellos, quizá durante demasiado tiempo.
Entre Nedovic y Kuzminskas llevaban 20 de los 38 puntos de Unicaja. Will
Thomas anotaba otros 8. Entre tres jugadores se estaban merendando al
Real en ataque. Unicaja había anotado 21 puntos en 5 minutos. Otro dato
muy preocupante para el Madrid. O defendía mejor o iba a pasarlo muy
mal. La máxima ventaja local llegó con 2 minutos para llegar al descanso
(46-32). Cinco puntos seguidos de Felipe Reyes y dos buenas defensas (al
fin) del Madrid, dejaron la ventaja local en 9 puntos al llegar al
ecuador de la semifinal (46-37). La tendencia del partido parecía
cambiar y el descanso le vino mal al Madrid. Su dependencia de Felipe
Reyes era exagerada.
Las faltas de Gustavo Ayón obligaron a Laso a cambiar el quinteto de la
remontada. El Real se enredó en el arbitraje incomprensiblemente y
perdió todo lo recuperado (53-39, min. 3). Es conocido lo difícil que es
jugar en Málaga con arbitraje ACB pero el Real volvió a caer en la
trampa. Reyes intentaba que los suyos no se fueran del partido, siendo
el único que tenía las ideas un poco claras en ataque. Pero no iba a ser
suficiente. Unicaja no necesitaba recurrir siquiera a sus mejores
hombres de la primera mitad porque son su defensa acogotaba al Madrid.
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Hernangómez intenta taponar a Hendrix.
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Jaycee Carroll no encontraba la manera de tirar de 3, Sergio Llull
estaba desacertado en el tiro y peleado con el mundo, Andrés Nocioni se
peleaba contra sus pares sin rédito alguno... y uno de sus pares le
hizo un traje, Germán Gabriel. Thompkins estaba desaparecido y Maciulis
se tuvo que retirar con un problema en un ojo tras un choque en la zona
malagueña. Un panorama desalentador a 2 minutos del final del cuarto
(64-48). Unicaja se puso 20 arriba en el último minuto y con 72-52 en el
electrónico, ya estaba en la final con 10 minutos por jugarse.
Unicaja quería más y Pablo Laso levantó la bandera blanca con la entrada
de Willy y Doncic. Con todo perdido el Madrid sacó la cara por no perder
de paliza con un quinteto extraño: Chacho, Carroll, Willy, Doncic y
Thompkins. En cuatro minutos mantuvo distancias (84-62) pero no inquietó
lo más mínimo a un Unicaja muy superior durante gran parte de la
semifinal. En un ramalazo de rabia, el Madrid hizo un parcial de 1-8,
con dos triples de Carroll (al fin) y dos tiros libres de Doncic (85-72,
min. 7). Plaza pidió tiempo para cortar la racha merengue. Y Thomas con
un triple y otra canasta más cercenó la mínima ilusión que quedara a los
blancos (94-79).
UNICAJA 94 (17+29+26+22): Markovic (5), Thomas (15), Dani Díez (10),
Smith (12) y Fran Vázquez (4) --cinco inicial--; Jackson (4), Díaz (2),
Hendrix (9), Suárez (4), Gabriel (4), Nedovic (12) y Kuzminskas (13).
REAL MADRID 79 (17+20+15+27): Llull (8), Maciulis (4), Carroll (16),
Reyes (18) y Ayón (4) --cinco inicial--; Nocioni (-), Sergio Rodríguez
(16), Doncic (9), Thompkins (2) y Hernangómez (2).
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