K.
C. Rivers y Felipe Reyes dan al Real Madrid una sufrida victoria ante el FIATC
Joventut (90-88)
Precioso partido el vivido en el Palacio
de los Deportes. Un gran Joventut puso contra las cuerdas al Real Madrid.
Rivers, con 5 triples en el último cuarto y Felipe Reyes con 11 puntos y 6
rebotes fueron claves en un épico triunfo ante un rival que nunca se rindió.
Ayón con 18 puntos y 5 rebotes fue el jugador más valorado por parte local.
Tariq Kirksay con 15 puntos, 2 rebotes y 8 asistencias, determinante en los
visitantes. El Joventut tuvo dos ocasiones para llevar el partido a la
prórroga.
Jornada
3 de la fase regular Liga Endesa ACB. Partido disputado en el Palacio de los
Deportes de Madrid. 19 de octubre de 2014. 19:45 horas. 8.064 espectadores.
El partido tuvo un comienzo eléctrico por
ambas partes. Por el Madrid, Campazzo, Maciulus, Carroll y Felipe Reyes (quien
cumplía 600 partidos en ACB) eran titulares junto con Gustavo Ayón. Un quinteto
nada habitual que se desenvolvió muy bien en ataque aunque fue menos efectivo
en defensa. En el minuto 5 la igualdad era total, 14-14, en gran parte por el
acierto del visitante Kirksay, autor de 7 de los 14 puntos de su equipo. Rudy y
Sergio Rodríguez se incorporaron a la cancha y el Real estiró la diferencia
(23-15, min. 7). Tres muy buenos minutos finales del Madrid le sirvieron para
llegar al final del primer cuarto con una importante ventaja: 33-22. Ayón con 9
puntos era el mejor de los blancos, bien secundado por Felipe Reyes (ovacionado
al ser cambiado) con 6 puntos. La valoración de los dos equipos era sintomática
de la superioridad blanca: 41-16.
Parece que el Madrid de comienzo de
temporada ha cambiado su forma de jugar. Para muestra este primer cuarto, donde
solo tiró 2 triples (para anotar 1) y 16 veces de 2 (con un 75% de acierto). El
juego entre pivots es mucho más efectivo y los relevos no son tan previsibles
como antaño. Laso tiene un plan.
El Joventut apretó en defensa en el
comienzo del segundo cuarto para acortar diferencias (36-32, min. 3). Un parcial
de 3-12 que coincidió con Llull y Sergio Rodríguez en cancha. Muy frío y fallón
el primero y demasiado individualista el segundo, forzaron a Laso a pedir
tiempo para cortar la racha verdinegra. Las cosas empeoraron para los locales
con la tercera falta de Ayón, entrar en el bonus por faltas y el empeño de Rudy
en jugarse canastas imposibles. El Madrid perdió 8 balones en el cuarto y se
vino literalmente abajo ante la defensa badalonesa.
Así las cosas, un triple de Kirksay dio
la vuelta al marcador cuando FIATC jugaba sus mejores minutos en el partido,
bien dirigido por Mallet (40-43, min. 7). El acierto desde la línea de 3 de los
hombres de Maldonado (8 de 17) les llevó a la máxima ventaja con un minuto por
jugar, 44-49. Hasta el público reconoció con aplausos la belleza de un alley
oop de espaldas de Kirksay finalizado por Albert Miralles (8 puntos al
descanso). Llull con un triple final dejó el electrónico en un apretado 50-51.
Segundo cuarto para enmarcar por el FIATC, sin duda, con un parcial de 17-29.
Tras el descanso el Madrid no reaccionó y
el Joventut seguía por delante con jugadas sencillas de pick&roll entre
Mallet y sus pivots (54-59 min. 4). El Real no sabía cómo parar estas acciones
porque Miralles y Savané estaban cuajando un gran partido; sin embargo un par
de decisiones arbitrales controvertidas (entre ellas la cuarta personal a
Campazzo) espolearon al público y al equipo blanco. Fue el catalizador que el
Madrid necesitaba. Con un parcial de 7-0 se puso por delante (61-59, min. 7)
liderado por un hiperactivo Llull pero no logró coger ventaja alguna. Al Real
le estaba costando sangre, sudor y lágrimas doblegar a un buen Joventut que
llegaba al último cuarto por delante, 64-66.
Un triple de Suárez elevó la ventaja a 5,
64-69 y el Madrid respondió con otro triple de Rivers. El Joventut se escapaba
nuevamente con acciones de Vidal, Mallet y Savané (67-76, min. 4), dejando al
Real muy tocado. Los de Laso estaban desquiciados por la labor arbitral y su
propio juego, demasiado espeso. Se encomendaron al “Gran Capitán”, Felipe Reyes
para intentar reducir ventajas. Y Felipe respondió como siempre: luchando hasta
el final. Contagió a los suyos que encorajinados y gracias a dos triples
consecutivos de Rivers dejaron la desventaja en dos puntos en un visto y no
visto (76-78, min. 6).
Rivers en una acción del partido, fotografía de
Real Madrid.com
Con los dos conjuntos en bonus por
faltas, los tiros libres iban a ser decisivos en los últimos 4 minutos. Otro
triple de Rivers, en estado de gracia, y cuatro puntos del mago Rodríguez
dieron la vuelta a la tortilla con 2 minutos por jugar (85-82). Al Joventut le
estaba pudiendo la presión y el quinto triplazo de Rivers les dejó casi
noqueados al entrar en el último minuto (88-84), pero los de Salva Maldonado no
se rindieron y con dos buenas defensas y 4 tiros libres seguidos empataron a 88
con 9 segundos por jugar.
Tras el tiempo muerto de Laso, una jugada
ensayada con Llull y Felipe como protagonistas puso al Real por delante,
gracias a la canasta del capitán merengue bajo el tablero verdinegro, 90-88, a
3.2 segundos del final. Un dos para dos de libro. Jugada de pizarra perfecta. Ni
Mallet, ni Suton, con un postrero palmeo, pudieron igualar el partido en el
último ataque. El Madrid, al fin, respiró tranquilo. K. C. Rivers, con 5 de 5
en triples en el último cuarto fue el héroe de una victoria sufridísima.
REAL
MADRID 90 (33+17+14+26): Campazzo (0), Carroll (6), Maciulis (4), Reyes (11) y Ayón (18)
--cinco inicial--; Rudy (7), Llull (10), Sergio Rodríguez (10), Bourousis (2),
Rivers (15), Mejri (0) y Nocioni (7).
FIATC JOVENTUT 88 (22+29+15+22):
Mallet (9), Vidal (5), Kirksay (15), Suton (8) y Savané (13).--cinco inicial--;
Barrera (5), Suárez (10), Hannah (8), Miralles (15) y Ventura (0).
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